Declaración del CECE: DEFENDAMOS LA UBA

Desde el Centro de Estudiantes de Ciencias Económicas queremos manifestar un total repudio a la situación en que hoy en día se encuentra envuelta la UBA. Nuevamente somos noticia, no por lo que sucede en las aulas o en los centros de investigación, sino por vernos inmersos en un incesante conflicto político que atenta contra el normal desarrollo de las clases. Entendemos que la mejor manera de defender lo público es bajo una buena gestión, y por sobre todas las cosas, respetando la expresión de los distintos claustros por medio de las elecciones. No son otros que los Consejeros Directivos que votamos hace más de un mes, quienes elijen Consejeros Superiores, Decano y Rector de la UBA.

Como estudiantes de la Universidad de Buenos Aires, sentimos que la actual conducción de nuestra Federación compuesta por la La Mella y el Partido Obrero (quienes en nuestra Facultad son el MxE) no representa al conjunto del movimiento estudiantil. En primer lugar, porque mientras reclaman la reforma del estatuto universitario, no respetan los propios estatutos de la organización gremial de todos los estudiantes de la UBA, lo que redunda en una situación no solo ilegitima sino también ilegal. En segundo lugar, porque en su postura de vanguardia iluminada y con sus planteos violentos, lo que logran es bloquear la posibilidad de que las grandes mayorías estudiantiles podamos ser protagonistas de un necesario debate universitario.

Estamos convencidos de que este nuevo ciclo que inicia debe conllevar ciertos cambios consigo. Es el momento de debatir determinadas reformas sobre nuestro Estatuto Universitario, focalizándose en la conformación y distribución de representantes que hoy en día existe en la UBA. Sin embargo, no tenemos duda de que ello será posible en un marco de consenso, de diálogo y acuerdo entre claustros. Quienes conformamos esta Universidad, no podemos permitir que una minoría no reconozca la forma en que esta se gobierna, y como, ese gobierno es elegido.

Entendemos que nuestras diferencias, de ningún modo, deben trascender al punto de dejar a la UBA en un estado de acefalía total, como ya ha ocurrido en elecciones precedentes, cuando los mismos grupos que hoy toman facultades, anteriormente impidieron sesionar a fuerza de palos y piedras. Esta situación, ya nos trajo serios daños a los estudiantes, como ser la no ejecución del presupuesto (traducido en el parate total de obras y refacciones y la interrupción del pago a los docentes) hasta la no emisión de títulos, pasando por una seria crisis política puertas adentro de la Universidad.

Esperamos que estos años hayan traído un mínimo de cordura y madurez (que hasta el momento no observamos) y que sea posible el normal desarrollo de la Asamblea Universitaria el próximo 5 de diciembre, que designará a nuestro rector por los próximos 4 años. Llamamos a toda la comunidad educativa a defender la Universidad pública, autónoma y cogobernada.